sábado, 8 de julio de 2017

VERDADES BRUTALMENTE HONESTAS DE LOS MALOS HABITOS DE ENTRENAMIENTO


Cuando hacemos algo de manera repetitiva, eso se convierte en un hábito. Cuando son buenas acciones, entonces se convierten en un buen hábito. Pero, ¿qué sucede cuando adquirimos malos hábitos?
Hoy compartimos con ustedes 6 verdades brutalmente honestas acerca de tus malos hábitos de entrenamiento y de las que probablemente no te has dado cuenta. Esta es tu oportunidad de arreglarlos y continuar en tu búsqueda de la grandeza.
Sobreentrenar es una de las peores cosas que puedes hacerle a tu cuerpo. Tu cuerpo necesita tiempo para recuperarse de todo el entrenamiento que haces durante la semana, y si no descansas lo suficiente, después sufrirás las consecuencias. Lesiones, agotamiento, insomnio – y la lista continúa. No importa si haces todo ese entrenamiento extra después de clase, si continúas con el sobreentrenamiento, definitivamente perderás más que solo algunas técnicas.

1) No practicar la defensa


Uno de los errores más comunes que todos hacen mientras entrenan es priorizar el ataque sobre la defensa. Es normal, a todo el mundo le gusta trabajar en sus ataques porque son divertidos y emocionantes. Pero trabajar en la defensa es algo muy bueno que todo artista debe hacer sin importar si le gusta o no. Después de todo, una buena defensa te permite estar un paso adelante de tu oponente mientras conectas uno o dos contraataques.


2) Omitir lo básico





Todos sabemos que se siente al finalmente conectar ese spinning back elbow o someter a alguien con un twister. Utilizar técnicas sofisticadas no sólo es divertido, también son una manera de demostrar tu conocimiento técnico superior. Aunque las técnicas complicadas son entretenidas de hacer, también debes estar familiarizado con los conceptos básicos. Los campeones mundiales enfatizan en dominar lo básico antes de trabajar en técnicas avanzadas. Esto es porque lo básico es el fundamento de cualquier técnica avanzada. Si no tienes en cuenta lo básico, definitivamente te estas preparando para fallar.

3) Ser predecible



Todos tienen una combinación, una sumisión o un juego de técnicas que aman usar. Lo hacen una y otra vez y se convierte en su movimiento característico. Pero, ¿qué sucede cuando todos conocen tu movimiento característico? O peor, ¿qué pasa si aprenden a defender y contraatacar tu movimiento? Para evitar verse envuelto en esta situación, debes tener variedad de movimientos en tu arsenal. Siempre debes tener técnicas de respaldo, contraataques y una gran defensa para así convertirte en un artista marcial completo.


4)Utilizar la fuerza en vez de la técnica





Es fácil caer en usar la fuerza cuando haces sparring, especialmente cuando estás abrumado. El poder definitivamente es más fácil de usar en vez de recurrir a la técnica en un sparring, principalmente si estás enfrentando a un oponente más grande. Desafortunadamente, tomar la salida fácil no es necesariamente lo más inteligente. Utilizar la fuerza sólo evita que aprendas de tus errores. La próxima vez que hagas sparring, en vez de simplemente intentar apartar a tu oponente, intenta un escape apropiado para el control lateral. Usa la cadera, haz camarón, todo lo que haga falta. Pero por tu bien, por favor no uses fuerza. Luego verás los beneficios, créenos.





5)Mala forma




¿Dejas caer las manos después de una combinación? ¿Tropiezas por culpa de tu mal juego de piernas? ¿Dejas caer la mano izquierda después de lanzar un jab? Ya sea que nos demos cuenta o no, los pequeños detalles son una gran diferencia en todo lo que hacemos cuando entrenamos. Hay que analizar todas las técnicas que hacemos y cómo las hacemos. Esto hará que estemos más conscientes de nuestros errores en los que debemos trabajar para mejorar en el arte marcial de nuestra elección.

Lo genial de reparar los malos hábitos es que eventualmente se convierten en buenos. Depende de ti trabajar para crear y reforzar buenos hábitos. Recuerda, todo lo que haces en el gimnasio es crear un hábito – ya sea uno bueno o uno malo. Utiliza tu tiempo sabiamente y no pierdas el enfoque en tu objetivo.




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